Las estaciones de trenes son vistas por la mayoría únicamente como lugares de paso. Sin embargo, muchas de ellas son verdaderas obras de arte, y lugares en los que –queramos o no– pasamos una parte de nuestras vidas, esperando a seres queridos o simplemente esperando a embarcar en algún tren. Cuando vengas a vivir en un piso de alquiler ShMadrid es muy probable que te encuentres en alguna de estas situaciones, y la estación de Atocha será un lugar inolvidable que descubrir.
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Estación de Atocha, historia del transporte en Madrid
Foto vía Pixabay
Desde finales del siglo pasado, cuando aún se llamaba estación del Mediodía y estaba en manos privadas, hasta hoy en día, ha habido muchos cambios, y aquella estación de finales del XIX obra de Alberto de Palacio y Elissague, con su grandeza y belleza de hierro y cristal, ha sufrido muchas vicisitudes, incendio incluido. Con la puesta en marcha de la alta velocidad, se hizo necesario adecuar las infraestructuras ferroviarias españolas. Rafael Moneo fue el encargado de llevar a cabo esta primera gran remodelación de la estación de Atocha. Se proyectaron dos estaciones distintas unidas por una galería. A la primera de ellas llegarían los trenes de cercanías, y de la segunda saldrían hacia el sur los nuevos y flamantes trenes AVE. Seguro que si tienes un alquiler pisos en Madrid alguna vez has estado en la estación de AVE. Es la denominada Puerta de Atocha, y en ella se puede disfrutar del antiguo edificio decimonónico, restaurado y convertido en jardín tropical, y que sirve de vestíbulo a las modernísimas instalaciones del AVE.
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Las estaciones de Atocha, intercomunicador del sur, y Chamartín, su homólogo del norte de Madrid, están unidas por túneles. El primero de ellos se finalizó en 1967 (aunque el proyecto era de 1937). Más tarde, con el cambio de milenio, se construyó otro más y, con la última ampliación de la estación de Atocha está previsto que en 2013 entre en servicio un tercero, con ancho internacional y exclusivo para la alta velocidad. Estos túneles reciben el curioso nombre de “túneles de la risa”, porque muy poca fe tenían en ellos durante la Segunda República, cuando se pensó por primera vez en su necesidad, y los asemejaron a una atracción de feria. Sin embargo, hoy en día, todo el mundo –y alquiler ShMadrid no es una excepción– reconoce su necesidad para las comunicaciones ferroviarias españolas. Desde aquella niña de la canción popular que se peinaba con peine de oro, todo el mundo ha pasado alguna vez por Atocha. Si disfrutas de un alquiler pisos en Madrid pero llegaste por otro medio de transporte, lleva a tu familia a conocer esta preciosa estación y descubre con tus hijos las tortugas y peces de colores que los madrileños han ido dejando en el jardín tropical.
¿Has visitado la estación de Atocha? ¿Qué te ha parecido?
